Shouganai Yume Oibito (Capitulo 1 "La chica Nueva")

Este ya es el capitulo 1 espero que les guste

Capitulo 1. La chica Nueva

Clasificacion: R-0

Ai POV

Aquí estoy, en las afueras del prestigioso Instituto Haku de la ciudad Tokio al que las niñas de la mas alta clase social asisten. Es exactamente como lucia en television, grande y sumamente elegante. Sus ladrillos finamente pintados de un color beige y bordes cafés por las orillas, y un enorme portal que me separaba de aquel lugar.

No pasó mucho tiempo desde mi llamada a la puerta para que alguien me recibiera. Era una Mujer mayor con un rostro severo. Espere un poco antes de hablar, trague saliva, y mostre mi mejor sonrisa.

-Buenos días, mi nombre es Takahashi Ai...mis padres mandaron una carta recientemente con el pago de mi inscripción.-Aquella señora me miro un poco antes de asentir con la cabeza.

-Es un verdadero gusto tenerla con nosotras señorita Takahashi, pase usted- Abrió el portón y se hizo a un lado para dejarme entrar. Con pasos temerosos emprendí mi camino junto a ella.- Soy la Prefecta Mioshi- explico- yo estoy a cargo de las niñas de esta institución, en particular del edificio B- informo señalándome el bastante alejado edificio.

El jardín era exageradamente grande, aquí se podría jugar un partido de futbol americano con todo y publico si se lo propusieran.

Al notar mi rostro abrumado Mioshi-San coloco su mano sobre mi hombro dando unas ligeras palmaditas- no se apure, terminara acostumbrándose, verá, el instituto tiene 3 edificios, el A que es donde estudian las niñas, ahí se encuentran las aulas, así como el gimnasio. El Edificio A tiene sus puertas abiertas de 7 de la mañana a 7 de la noche., el horario más tarde se le entregará para que se pueda organizar y terminar sus labores-asentí ante sus indicaciones-El edificio B, del cual soy la prefecta, es donde estan los dormitorios, también en el Edificio C hay dormitorios pero están separados. Estos obviamente están abiertos de 6 de la mañana a 8 de la noche, esta prohibido que las alumnas estén fuera después de las 8 de la noche.

¿Prohibido? Ya decía yo que este lugar era muy lindo para ser perfecto.

Seguimos caminando y no parecia que nos acercaramos a nuestro destino, ¡esto daba miedo! el jardín adornado de la flora mas exótica que alguna vez había mirado, sin embargo olia muy bien.

Mioshi san educadamente me dejo pasar primero. Si el exterior era elegante, se quedaba muy corto en comparación con el interior. El piso de Azulejo brillaba intensamente como si acabara de ser pulido. Tambien había un estrecho y muy iluminado Pasillo. A los alrededores podían verse estatuas o reliquias como quieran llamarle, también cuadros que al parecer eran de antiguas directoras del colegio, todas con caras similares a las de un zapo estreñido… por cierto ¿eso existe? ¿Los zapos se estriñen?...

-Señorita Takahashi, espere un momento por favor, iré por su papelería-me informó amablemente Mioshi-san y se retiró por el estrecho pasillo.

Dicen que la curiosidad mato al gato...y ahora esta muy enterrado.

¡Enserio nadie podria acostumbrarse a esto!, era tan hermoso, como anticuado y tetrico a la vez! , jamas pense que algo podria ser asi.

Me paseé un poco más por las instalaciones, asomando mi cabeza en todas direcciones, se que deberia hacer caso a lo que la prefecta me ordeno , pero enserio tenia que asegurarme de que todo esto no era una fantasia.

El golpeteo de las zapatillas contra el suelo me hizo girar hacia la derecha donde un considerable numero de jovenes caminaron en fila. No pude evitar sonreir, ¡esto parecia la maternal!, tan ordenadas y en silencio, como si temieran ser reprendidas.

-Gaki-san....Gaki-san!!!-Ese grito despejo mis pensamientos. Era una chica de cabello claramente teñido al castaño, con el uniforme desalineado en comparacion a sus compañeras, y una coleta singular en su cabeza.

-oh…Reina-chan…-contesto la otra chica. Su cabello rizado bailo al momento de volverse hacia atras.

Me quede quieta observando como aquellas chicas pasaban frente a mi sin siquiera percatarse de mi presencia.

-Takahashi san- Ups...esa era la prefecta, congelada aun por la sorpresa me gire hacia donde provenia su voz - te dije que no te movieras de donde te deje…

-Rasque mi nuca-lo…lo siento Mioshi-san…

-Prefecta Mioshi-san por favor-desvié la mirada ante ese comentario-acompáñeme por favor, necesito que firme su ingreso, ya que sus padres no se han podido presentar ,lo haremos en presencia de un tutor que se le fue asignado. -asentí y la seguí a su oficina.

Una vez que firme esos molestos documentos me llevo a lo que seria mi Aula.

-Bien, este será su salon de clases, entre ahi y presentese con su profesora y sus compañeras.- sin decir mas me dejo ahi sin ninguna arma para la batalla.

¡Miedo!

ok...no pasaba nada, solo tenia que entrar ahi y decir quien soy...no hay porblema con eso...supongo.

Respire hondo antes de tocar a la puerta, la profesora en ese momento explicaba algo a la clase.

-Disculpe...

Dejó lo que hacia y me hizo una seña para que entrara. En mis manos traia mi boleta de inscripcion el cual se la entregue a la profesora.

Observó el papel que le había entregado y se dirigió a sus alumnas-como se habrán dado cuenta, tenemos aqui a una nueva compañera- me miró- ¿por que no te presentas?-Asenti tímidamente levantando mi rostro y mire hacia el frente. Era abrumador tanta atención, no estaba muy acostumbrada a eso…

-Claro- sonrei tratando de no salir de ahí huyendo- Mi nombre es Ai Takahashi, tengo 17 años y vengo de Fukui, por favor aceptenme como su compañera- hice una rapida reverencia y volvi a mi posicion original.

-Takahashi san- habló mi profesora- por favor toma asiento junto a Tanaka san- señalo a la chica que vi hace unos momentos en el pasillo.

Camine rápidamente hacia el lugar vació y deje mi mochila a un lado, sacando mi cuaderno y el bolígrafo, dejándolos en mi pupitre.

Era realmente dificil concentrarse teniendo una mirada tan penetrante detras de mi. ¿Que sucede? ¿Traigo algo en mi espalda?, mire de reojo y la chica de cabello rizado que vi en el pasillo parecia no captar mi indirecta.

Después de minutos que parecieron horas y gracias a Kami sama , sonó el timbre que indicaba el desayuno, tan pronto como pude sali de ese lugar.

Sentia escalofrios, la tension aqui era enorme como sus paredes.

Un gruñido en mi estomago me pedia a gritos algo de alimento, asi que entre a la cafeteria...

-wooh...- ¿Dije cafeteria?…esto mas bien es un comedor, no podría compararse con la cafetería de mi antigua escuela. No, para nada, la amplia mesa reservada exclusivamente para 4 personas en cada una, con esas sillas forradas de un suave cojín rojo vino. Parecia un restaurant.

-Por dios...

Un gruñido mas de mi estomago.

-ok ok...ya voy- dije a mi barriga y tome una bandeja. ¿que demonios era esto?, las placas con los nombres de los alimentos del dia era tan extraños como el aspecto de la misma comida.

-ni siquiera puedo pronunciar eso...- Este era el momento cuando extrañaba un buen tazon de fideo.

-discula...¿puedes moverte?- una chica dijo detras de mi.

-Lo siento- tome un poco de...bueno, lo que fuera eso y una manzana que por poco me ganaban.

Busque una mesa disponible y saque una revista de mi mochila.

-¿ayuda?- mire sobre mi revista. Era ella otra vez, la chica rebelde del pasillo.

-Iras al cielo- contesto su amiga.

Sonrei y segui mirando mi revista, no es que fuera muy interesante, pero no tenia nada mas que hacer.

El chirrido de la silla frente a mi, nuevamente distrajo mi atencion de la lectura, aquella chica de cabello rizado salio corriendo del comedor. Sus amigas parecian tan desconcertadas como yo, pero ese no era mi problema. Escuche parlotear a aquellas niñas pero le di poca importancia.

-sera un dia largo- murmuré dando una mordida a mi manzana. Definitivamente, este no era mi ambiente.

-Hola- escuche y levante mi rostro. Otra vez, aquellas chicas.

-Hola- conteste expectante. ¿que podrian querer?

-Nosotras somos Eri Kamei y Reina Tanaka, estas en nuestra clase.

Sonrei en su declaracion. Era obvio, ¿como no recordarlas?.

-si las recuerdo-conteste con una sonrisa-tu eres la chica que no dejaba de golpear mi banco con el lápiz – señale primero a la castaña - y tu eres la que hacia dibujos en la pasta del libro.-ahora señalando a la morena.

-ahh…- Eri busco ayuda en su amiga.

-como sea-La voz de Reina era grave- ¿eres pariente de Asuka Yato?.

¿Qué soy pariente de quien?...¿y esa quien es?

-vaya, eres muy directa - le sonreí abiertamente por su determinación, eso era algo que realmente me agradaba de las personas-pero no...no soy pariente de esa tal Asuka- miré nuevamente mi revista.

-¿enserio?…eres idéntica a ella - intervino la morena acercándose más a mi, haciendome sentir un poco incomoda.-solo que tu tienes el cabello castaño, y Asuka lo tenia Negro…pero en todo lo demas eres identica…

-No quiero ser grosera, pero esa tal Asuka no tiene nada que ver conmigo, enserio-recalque- así que ¿Por qué seguir con el tema?.

-...ok- parece que Eri lo comprendio, trate de ignorar el asunto y volvi a mi lectura-y ¿ya te otorgaron alguna habitación?.

Respire hondo antes de contestar, parece que no me dejaran sola-si, mmm...dormitorio 103 - respondí sin interés.

-¡woa! ¿¿103??- grito Reina sobresaltando a mis compañeras en el comedor.

-genial, estarás a un lado de nosotras, estamos el 102 –Eri Kamei me sonrío abiertamente posiblemente ante el hecho de que estuviéramos cerca…creo.

-Eri…dijo habitación 103-Reina Tanaka dejo su mano en el hombro de su amiga.

-si ya escuche…

-Es la habitación de Risa

-oh...OHHHH!

Me sentía un poco confundida y abrumada por sus preguntas por lo que decidí retirarme del lugar.

-Disculpen, tengo que irme, nos vemos-dije haciendo un ademan con mi mano y salí del lugar.

Sin esperar su respuesta salí por la puerta , cruzando asi uno de los ya tan famosos pasillos, este era largo, muy largo a decir verdad, de pronto comencé a sentir un ligero malestar en mi cabeza , algo así como una punzada en las sienes, fue tan doloroso que me impidió seguir, me recargue en una de las paredes para tener equilibrio y no caer, pero de un momento a otro mi visión se tornó nublosa y oscura.

-¿estas bien?-escuche a lo lejos, siento toda la presión en mi cabeza, ya no logro escuchar absolutamente nada, solo recuerdo que una sombra se acerco a mi y me sostuvo.